VALÈNCIA. Del 12 de junio al 28 de julio, València volverá a acoger a todas las formas del jazz. El Festival de Jazz del Palau de la Música celebra su 28º edición con una programación que combina figuras internacionales consagradas, apuestas locales bien asentadas, proyectos pedagógicos y actuaciones gratuitas en espacios abiertos. Una propuesta pensada para públicos diversos que convierte la ciudad en un punto de encuentro entre las múltiples tradiciones del género.
Entre las figuras más destacadas del cartel figuran Avishai Cohen (2 de julio), Eliane Elias (3 julio), Mulatu Astatke (5 julio), Andrea Motis (6 julio), Michel Camilo & Tomatito (8 julio), Julian Lage (9 julio) y Al Di Meola (12 julio). Desde el jazz moderno a la bossa nova, del ethio-jazz a la fusión flamenca, del swing vocal al virtuosismo instrumental, el festival traza un mapa sonoro que cruza continentes y generaciones. “El festival inclou una gran varietat estilística, des dels més puristes fins a la fusió”, resumió Vicente Llimerá, director del Palau. “Lo més important és la qualitat artística i que d’eixa qualitat participe el teixit local i les futures generacions”.
Una presencia especialmente significativa será la de Mulatu Astatke, considerado el padre del ethio-jazz, que actuará en València como parte de su gira de despedida (el concierto estuvo programado en La Rambleta los días inmediatamente posteriores a la Dana, se canceló, y se ha podido reprogramar aquí). También destaca el regreso del contrabajista israelí Avishai Cohen, que presentará su último trabajo, Brightlight, al frente de su trío, o la actuación de Julian Lage, prodigio de la guitarra contemporánea.
Más allá de los grandes nombres internacionales, la programación reserva un espacio destacado para los músicos de la Comunitat. No es una cuota: “El jazz valenciano está extraordinariamente consolidado y maduro —afirmó Enrique Monfort, coordinador del festival—. Aunque tal vez empezó como una escena muy vinculada a los ritmos latino, ahora se ha desarrollado por encima de los estilos”.
El arranque del certamen, el 12 de junio, corre a cargo de la Banda Simfònica Municipal de València y el New Tango Sextet, dirigidos por Cristóbal Soler, que interpretarán ió de Tango en un concierto gratuito al aire libre. Se trata de una propuesta que ya anticipa una de las señas de identidad del jazz hecho en València: su capacidad para integrar influencias diversas sin perder carácter propio.
El 25 de junio será el turno de Ximo Tébar & The Champs, grupo liderado por uno de los nombres más reconocidos del jazz mediterráneo. El guitarrista valenciano compartirá escenario con figuras como Pat Bianchi, Donald Edwards, Nacho Mañó y Will Martz, en un espectáculo con invitados especiales que subraya el músculo creativo del territorio.
El 1 de julio, Marquina Selfa Trio meets Georgia Mancio y el espectáculo València London Connection pondrán en diálogo a músicos de ambas ciudades. Y el 10 de julio, Ester Andújar Group feat. Carles Dénia & David Pastor ofrecerán Inner Songs, una propuesta que, sin perder de vista el lenguaje jazzístico, explora la conexión con otras tradiciones como la canción mediterránea o el repertorio poético.

- Michel Camilo y Tomatito -
La Orquestra de València se hace fuerte en el festival
Uno de los elementos más remarcables de esta edición es el protagonismo creciente de la Orquestra de València, que participa en el festival con dos propuestas de distinto formato. El 4 de julio actuará en la Sala Iturbi junto al trompetista venezolano Pacho Flores bajo la dirección de Manuel Hernández Silva. El 13 de julio, varios de sus solistas compartirán escenario con el trompetista valenciano Chipi Chacón, habitual de la escena internacional, en un concierto de cámara con arreglos sinfónicos de repertorio jazzístico.
“La presencia de la Orquestra es mayor y queriendo”, subrayó Nieves Pascual, subdirectora de Música. Y añadía: “La Orquestra está en un nivel excelente y es fruto de un trabajo concienzudo y de mucha reflexión”. La formación del Palau pasará, en tan solo unas semanas, de Mahler al jazz, como muestra de su versatilidad y de su disposición a ampliar horizontes artísticos: “El gusto con el que la Orquestra acoge estos repertorios diferentes es una muestra del trabajo por llegar a nuevos públicos sin perder la excelencia artística”, remataba Llimerá.
Esta apertura también se refleja también en la programación del 11 de julio, con el espectáculo Els clàssics de Broadway, que contará con las voces de Paco Arrojo, Lorena Calero, Silvia Luchetti y David Pérez, bajo la dirección musical de César Belda.
Conciertos a los pies del Puente de la Solidaridad
En esta edición, el ciclo Jazz a les pedanies sustituye al habitual Jazz als barris, en un gesto de reconocimiento a las zonas afectadas por la Dana. “Desde el minuto 1 nos pusimos a trabajar. El apoyo a los artistas afectados ha sido constante”, señalaba ayer Llimerá.
El polideportivo de Castellar-l’Oliveral y la Alquería Coca de La Torre (ubicada junto al Puente de la Solidaridad, y casa de Sedajazz, uno de los colectivos más afectados por la Dana) acogerán cuatro conciertos gratuitos entre el 19 y el 27 de julio, todos ellos a las 21.00 horas y con una fuerte presencia de proyectos valencianos.
El ciclo se abrirá con la Big Band de Juan Saus & Martina Sabariego (19 julio) y continuará con El Latinswing Sextet de Joan Benavent (20 julio), Carlos Medina Quintet (26 julio) y Plena 79 Salsa Orchestra (27 julio).
Además de los conciertos, el festival refuerza su dimensión formativa con el XXV Seminari Internacional de Jazz i Música Llatina, que tendrá lugar del 7 al 10 de julio en el Conservatori Municipal José Iturbi. Dirigido a estudiantes y músicos profesionales, incluirá clases magistrales, jam sessions y actividades complementarias. “És una de les activitats que més hem de protegir de cara al futur —afirmó Llimerá—. Apostar tant pels músics jóvens, com pel públic jove i que vegen en el Palau sa casa per a actuar i per a gaudir com a públic”.
En esa línea de conexión intergeneracional y vocación pública se sitúan también propuestas como València London Connection (1 julio) o Inner Songs (10 julio), a cargo de Ester Andújar Group con Carles Dénia y David Pastor. “Enriquecer al público entre estilos —explicó Nieves Pascual—. Están más cerca de lo que el público cree”.
Un cambio de gestión ahorra una inversión del 40% en solo un año
En el plano más orgánico del festival también hay novedades. El Palau de la Música ha generado la programación únicamente a través de promotoras valencianas, con las que además ha cambiado el modelo de inversión y retorno de dinero. Si antes el Palau pagaba y recaudaba todo el concierto, se ha negociado con las empresas transitar a un modelo de taquillaje, por lo que el riesgo o la ganancia depende más de la iniciativa privada y el coste para el Palau de reduce drásticamente.
Según los datos avanzados ayer por sus responsables, de unos 250.000 euros del año pasado, el Festival de Jazz tendrá este 2025 un coste de 150.000 euros, una reducción de cerca del 40% “con una calidad igual o mayor de artistas”. No se trata de magia sino que también pierden ganancia, y trasladan esa fluctuación a las mismas promotoras. Este modelo de taquillaje, habitual en grandes ciudades como Madrid o Barcelona, también se podría extender en otras propuestas a lo largo de la temporada regular del Palau de la Música.