VALÈNCIA. Las 132 enmiendas presentadas por Vox a los presupuestos de la Generalitat de 2025 están ocupando en la presente semana un espacio relevante en la agenda política valenciana. El pasado 17 de marzo, el jefe del Consell y líder del PPCV, Carlos Mazón, comparecía públicamente para anunciar un preacuerdo con el partido de Abascal para aprobar conjuntamente las cuentas del presente ejercicio, que se habían retrasado por la catástrofe de la Dana y también por la falta de mayoría parlamentaria en Les Corts, dado que PSPV y Compromís ya habían anunciado su rechazo.

En aquella comparecencia, Mazón asumió en su discurso algunos de los postulados de Vox en relación a la migración o el Pacto Verde Europeo, una maniobra que contó con la bendición de Génova (dirección nacional del PP) y que provocó un fuerte impacto mediático.

Ahora, con la presentación de enmiendas a los presupuestos, es cuando llega la factura detallada de aquel pacto anunciado por el presidente de la Generalitat, con reivindicaciones por parte de Vox que, en algún caso, suponen posiciones incómodas para la formación popular, dado que le obligan a decisiones en la acción política con las que no está de acuerdo.

En este sentido, la cartera más señalada por Vox en sus iniciativas para la modificación presupuestaria es la conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, con la vicepresidenta Susana Camarero al frente. Así, 56 de las 132 enmiendas presentadas por la formación de Abascal, el 42%, van dirigidas a modificaciones (ya sea de partidas económicas o de redacción) hacia esta cartera. En total, Vox pone sobre la mesa cambiar de destino o variar la finalidad a 27,3 millones de euros: una cantidad que a priori podría parecer pequeña en una conselleria con un presupuesto de 3.000 millones de euros pero que, en este caso, sí resulta importante al referirse a programas de transferencias y subvenciones donde el departamento ejerce la acción de carácter más político y donde las cantidades a manejar son más limitadas.

De esta manera, el foco de Vox respecto a esta conselleria se centra principalmente en tres direcciones generales, especialmente en las enmiendas relacionadas con cambios presupuestarios y no de 'relato'. Así, la DG Igualdad y del Instituto de las Mujeres con 8 enmiendas (470.000 euros modificados), la DG de Diversidad con 12 enmiendas (cambios de 4,27 millones euros) y la DG de Inclusión y Cooperación con 9 enmiendas (con el grueso de las variaciones solicitadas, 22,2 millones de euros), son las que concentran el grueso de los cambios propuestos por los voxistas. 

Tal y como informó este diario, algunas de las más llamativas y de mayor importe son las referidas a Inclusión y Cooperación, donde Vox pide por ejemplo disminuir 7,5 millones de euros destinados a ONG para acciones de desarrollo sobre migración, para destinar los fondos en su mayor parte a lo que denominan "Operación Retorno" de migrantes a sus países de origen. También, pretenden la supresión de 5,3 millones de euros para ONG dirigidas a la cooperación para la "reactivación económica en los municipios afectados por la riada" o la eliminación de los 1,6 millones de euros para entidades sin ánimo de lucro que presten servicios especializados en el ámbito LGTBIQ+, para destinarlo a "la compra de bienes básicos en familias con más de tres hijos".

Unas enmiendas de Vox por las que fue preguntada, además de por otras, este miércoles la vicepresidenta y portavoz en el Consell, Susana Camarero, quien trató de no tomar posición. "Todas las enmiendas están en trámite parlamentario, y a lo largo del mismo se verá qué enmiendas se aprueban o no", se limitó a indicar inicialmente. 

No obstante, inquirida por los, 5,5 millones de euros para la "Operación Retorno" propuesta por Vox, Camarero recordó que la Generalitat no tiene la competencia para atender a los menores migrantes cuando cumplen la mayoría de edad. Tras reiterar que la Comunitat Valenciana es "solidaria", recalcó que "se están colando menores" en los cupos de adultos porque "el Gobierno no les hace la prueba de edad". 

Por otro lado, sobre las enmiendas de Vox que reducen partidas en materia LGTBI, la vicepresidenta garantizó que el Consell mantendrá su política de "diversidad sin sectarismos ni ideología, no como el gobierno anterior". "Y ahí vamos a seguir trabajando", sentenció. Sobre esta cuestión, cabe recordar que Camarero ya mantuvo en su día un pulso con el anterior vicepresidente del Consell, Vicente Barrera, cuando Vox formaba parte del gobierno, cuando este mostró su rechazo a la campaña Orgull LGTBI que impulsó la dirigente del PP, lo que apunta a que esta enmienda -así como otras del paquete de Vox-, no serán fáciles de aceptar por la vicepresidenta.