VALÈNCIA. El efecto Pigmalión, también conocido como la “profecía autocumplida” es un fenómeno social que se refiere a las expectativas que se tienen sobre las personas y cómo estas afectan en sus resultados y su rendimiento, algo que en términos más propios de campaña de Mr. Wonderful se podría comprender como: “El primer paso para conseguirlo es creértelo”. Aunque se suele pensar que se emplea de forma positiva para colectivos como los de personas discapacitadas su “efecto” es más bien el contrario. La diseñadora Lorena Osorio pone ahora el foco sobre esta realidad en su muestra Lo personal es político (y gráfico) que puede visitarse en Lalenta -a partir del 18 de junio- dentro del programa del Cicle Cultural Descobrim de COCEMFE València.
Un ciclo que celebra su quinta edición en la ciudad bajo el lema Ara tu, desde el que hacen una llamada a hacer visible la discapacidad desde quienes la viven “trasladando estas voces al espacio cultural valenciano, desmontando estigmas y abriendo nuevas formas de representación”. Dentro de este, y a través del diseño, Osorio reflexiona sobre la falta de oportunidades laborales de las personas discapacitadas a través de una cartelería que “impacta e incomoda” a partes iguales y que sirve como espejo para quienes no les sitúan en el mismo lugar: “Yo misma tengo un 75% de discapacidad y me resulta imposible verme representada en la cultura de una forma que no sea lastimera o triste”.

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“Las personas discapacitadas somos mucho más que eso, somos personas alegres que queremos hacer cosas y eso es lo que reivindico desde el diseño. Trabajo una gráfica más reivindicativa, cañera y colorida que busca expresar en tono irónico las realidades que vivimos”, destaca la artista. Entre su obra se pueden ver productos de limpieza que ayudan a “desinfectar el mercado laboral” o “desincrustar creencias viejas” gracias a la lucha contra los prejuicios que se tienen sobre las personas discapacitadas a la hora de acceder al mercado laboral, por ejemplo. Un enorme limpiador rosa promete la “fórmula intensiva, quita excusas” contra frases que funcionan como negativas como: “No tenemos experiencia con personas con discapacidad” o “no se adaptarían bien al ritmo de equipo”.
Diseñando las vivencias de su día a día, Osorio reflexiona sobre cómo ese mensaje puede llegar a un público más amplio: “Me gusta emplear un lenguaje cercano y que sea llamativo, pero se entienda. Trabajo con códigos del colectivo -como la palabra “disca” para referirse a “discapacitado”- e intento reapropiarme de las realidades contra las que luchamos día a día”. Buscando el concienciamiento social y con un tono mordaz, pero “valiente” Osorio considera que con Lo personal es político (y gráfico) puede emplear el diseño para “conquistar espacios” en los que tienen que caber sus discursos: “Quiero generar conciencia sobre el colectivo y mostrar mi perspectiva propia como persona con discapacidad. Me gusta pensar que el diseño puede servir como herramienta para acercar esta realidad al público y que nuestra historia también se puede contar en colores llamativos y tipografías bold”.

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