Un rápido repaso a la trayectoria de Fernando Díaz Requena (Benidorm, 1977) corrobora que el suyo es un itinerario rico y diverso. Desde hace poco más de un año, es socio de EY en la Comunitat Valenciana y Murcia, entidad en la que afronta su segunda etapa, tras ejercer como director territorial de Transacciones entre 2015 y 2017. Antes, desempeñó también puestos de responsabilidad en entidades financieras como Bankinter, una constructora y promotora e incluso en la Generalitat Valenciana, donde fue secretario autonómico de Economía durante la etapa de Máximo Buch como conseller. Un recorrido «ecléctico», como él mismo describe, que se traslada a sus gustos literarios o musicales.
«Soy lector de estaciones de tren y de aeropuertos. Compro los libros en función de mi estado de ánimo y aprovecho los viajes para leer», confiesa. Ahora, y aunque puede decantarse tanto por títulos de no ficción relacionados con su trabajo como por novelas que le sirvan para desconectar, ha vuelto a detenerse en Mario Vargas Llosa a raíz de su reciente fallecimiento y lee La ciudad y los perros. Respecto a la música, escucha, por ahora, «de todo menos reguetón», y los fines de semana desayuna con un disco de esenciales de música clásica que tiene «desde hace veinte o treinta años». Además, sus amigos de Andalucía, una región en la que ha pasado años de veraneo, le introdujeron en el mundo del flamenco.
De vuelta al plano laboral, Díaz Requena reconoce que cada una de las situaciones en las que se ha visto envuelto comparten dos denominadores comunes: un buen ambiente de trabajo y un reto profesional al que hacer frente. «Cuando no se cumplía una de esas dos premisas, mi deseo de continuar aprendiendo o de buscar nuevos desafíos prevalecía», asegura. Del mismo modo, considera que el hecho de haber pasado por empresas tan diversas le otorga un gran conocimiento «del tejido empresarial y productivo de la Comunitat Valenciana y de Murcia».
En crecimiento
Sobre la situación de EY en esas comunidades, explica, desde la recién estrenada oficina de la consultora en València, que al final del año fiscal, que termina en junio de 2025, deberían facturar cerca de trece millones de euros en empresas domiciliadas en ambas regiones. «Esto implica un crecimiento, más o menos, del 20% con respecto al ejercicio anterior», asegura, no sin antes añadir que el objetivo para los próximos tres años es alcanzar «veinte millones de euros en facturación» y «doscientas personas» en la oficina.

- Eva Máñez
Todos estos objetivos persiguen el reto, a medio y largo plazo, de lograr replicar en la facturación de la consultora el peso que la Comunitat Valenciana y Murcia tienen en el PIB de España. Para ello, y en línea con las perspectivas de crecimiento en estos territorios, EY puso en marcha un plan estratégico que se asienta, entre otros aspectos, «en el desarrollo regional». Así, y mientras que en tiempos pasados solo contaban con las áreas de legal y fiscal, y de auditoría en la oficina de València, desde hace un año y medio han incorporado las ramas de consultoría y de estrategia.
«Esto nos permite ofrecer una mayor cercanía a los clientes y dar un mejor servicio. Les da más confianza, tienen claro que estamos establecidos aquí y que hay una relación de largo plazo», continúa el socio de EY. Una proximidad que va también de la mano del compromiso social de la firma, que tiene la voluntad de generar impacto y de vincularse a la sociedad, como demuestra el hecho de que muchos de sus trabajadores sean docentes universitarios o que se promuevan iniciativas de voluntariado y de apoyo a entidades como Casa Caridad.
Contexto geopolítico preocupante
Respecto a la incertidumbre comercial, derivada en gran parte de las políticas arancelarias del presidente de EEUU, Donald Trump, Díaz Requena reconoce que el contexto es «preocupante». Aun así, explica que trata de centrarse en aquello que está en su mano, y que en EY trabajan con los clientes «en la revisión de sus cadenas de suministros» para que tengan planes alternativos. «Es una época de cambios, y el debate es si perdurarán en el tiempo o si serán un shock que se absorberá sin una modificación estructural». En cualquier caso, y como constata, las empresas «ya están mentalizadas para gestionar el cambio y la crisis continuamente».
Sobre la plaza financiera valenciana, Díaz Requena confirma la buena salud de la inversión extranjera, pese al contexto de «enfriamiento dada la situación arancelaria». «Creo que la Comunitat Valenciana y Murcia son receptoras y generadoras de inversión», plantea. Por último, y al ser preguntado por el nivel de cultura financiera de la sociedad, señala que todavía hay recorrido de mejora y que debe generarse «inquietud». «Tenemos que inculcar a la gente las ganas de formarse», insiste. Además, considera que el aprendizaje es un proceso continuo y que siempre es necesario renovarse y actualizarse.

- Eva Máñez
Formación & hobbies
Estudios: Grado en Empresariales y Relaciones Internacionales por la Universidad Pontificia de Comillas, con dos años de estudios en Madrid y otros dos en Francia.
Máster y cursos: Máster en fiscalidad y tributos.
Idiomas: Inglés, francés, castellano y valenciano.
Hobbies: Lectura, música, pádel, golf y running.

* Este artículo se publicó originalmente en el número 126 (mayo 2025) de la revista Plaza