VALÈNCIA. En Godelleta, el campo y el paisaje no se negocian. El ayuntamiento, que dirige la popular Amparo Pardo, ha aprobado una medida para evitar la instalación de grandes plantas fotovoltaicas que podrían transformar su territorio agrícola y residencial. Este jueves, el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) ha publicado la modificación número 18 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), una norma que establece límites concretos a este tipo de infraestructuras en suelo no urbanizable.
En concreto, la nueva regulación prohíbe la implantación de plantas solares a menos de mil metros del núcleo urbano, al mismo tiempo que impide su instalación en un radio de cien metros alrededor de zonas residenciales o viviendas ya construidas. Tampoco podrán levantarse en suelos con cultivos de alta productividad, como cítricos o viñedos, muchos de ellos beneficiarios de ayudas públicas y con sistemas de regadío modernos.
Estas tierras, según defiende el consistorio, no solo forman parte del paisaje tradicional, sino también suponen un pilar económico para el municipio. La norma afecta a todo el término de Godelleta y busca preservar espacios de valor ambiental o paisajístico. Así, el documento publicado en el DOGV se refiere a zonas forestales, áreas con riesgo de inundación, terrenos con fuerte pendiente y corredores naturales.
Otras obligaciones que conlleva la norma
Por otra parte, la modificación obliga a que las líneas eléctricas de evacuación asocidas a estas plantas deberán soterrarse si atraviesan suelos protegidos o sensibles, salvo que ya existan infraestructuras similares que puedan aprovecharse.
Eso sí, la nueva normativa permite la instalación de placas solares para el autoconsumo, tanto en viviendas como en explotaciones agrícolas o industriales. Siempre que la energía generada no supere las necesidades de la actividad y se respeten las condiciones ambientales, estas infraestructuras se podrán instalar.
Además, el Ayuntamiento de Godelleta aclara que, incluso con estas restricciones, seguirán existiendo cerca de 50 hectáreas disponibles para ubicar grandes plantas solares sin invadir suelos agrícolas ni residenciales.
El ayuntamiento ya rechazó otro proyecto fotovoltaico
Este cambio en el planeamiento urbanístico del municipio no llega por sorpresa. Hace casi un año, en junio de 2024, el Ayuntamiento de Godelleta ya mostró su oposición frontal a la expansión de infraestructuras energéticas con una moción, aprobada por unanimidad, contra la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable a la línea de alta tensión proyectada por la empresa Renovalia Manilva.
Esta línea, de más de 50 kilómetros de longitud, atravesaba varias comarcas y estaba destinada a evacuar la energía generada por macroplantas solares situadas lejos del municipio. El consistorio denunció entonces que el proyecto era "desproporcionado", con un grave impacto sobre caminos, redes de riego, parajes naturales y el entorno del Parque Natural del Turia.
- Municipios afectados por la línea de alta tensión. -
- Foto: VISOR CARTOGRÁFICO GVA
Asimismo, el ayuntamiento criticó que no hubo tiempo suficiente para analizar el expediente, ya que fue trasladado al órgano ambiental solo dos días antes de que se emitiese la DIA favorable. Con la modificación del PGOU, Godelleta consolida su apuesta por una transición energética ordenada y respetuosa con el territorio.
No se opone a las renovables, insiste el ayuntamiento en el documento, pero sí a un modelo que ponga en riesgo el paisaje agrícola, la biodiversidad local y la forma de vida de quienes han elegido vivir en este entorno.
