VALÈNCIA (EP). El Ayuntamiento de València ha adjudicado este viernes, en la Junta de Gobierno Local, el contrato de los servicios de explotación y mantenimiento del Sistema Municipal de Saneamiento (SMS) de la ciudad, con una extensión de casi 1.400 kilómetros, a la unión temporal de empresas (UTE) conformada por Acciona Agua, Becsa y Cicloagua.
Así lo ha indicado el edil portavoz del ejecutivo municipal, Juan Carlos Caballero, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local. Este es una de los grandes contratos adjudicados por el consistorio para garantizar el funcionamiento de servicios públicos. Cuenta con una duración es de quince años y un presupuesto total de más de 281 millones de euros.
Caballero ha asegurado que esta es "una adjudicación clave para el funcionamiento de la ciudad". "No es algo que se ve, no es algo que reciba muchos titulares, pero es una cuestión importantísima para València. Estamos hablando de una inversión de calado porque es para un servicio muy importante. Es una inversión en algo que no se ve, pero que está y que, si no funciona, lo notamos", ha remarcado.
A la licitación pública, iniciada el 31 de mayo de 2024, se presentaron siete ofertas, firmadas todas ellas por uniones temporales de empresas dada la envergadura del contrato.
De estas únicamente cinco llegaron al tramo final de la licitación, ya que una de ellas fue excluida por no alcanzar el umbral mínimo de puntuación para continuar en el proceso selectivo y otra más quedó apartada por presentar una oferta anormalmente baja.
La mesa de contratación seleccionó finalmente la propuesta de la UTE de Acciona Agua, Becsa y Cicloagua por un importe de 281.208.279,66 euro.
Juan Carlos Caballero ha destacado que la longitud total de las conducciones del Sistema Municipal de Saneamiento de València es de 1.388,7 kilómetros, de los que 179 son alcantarillado visitable y el resto, más de 1.209 kilómetros no visitable. Su volumen anual de bombeo suele ser variable aunque puede superar los 87 millones de metros cúbicos, mientras que el volumen depurado es de 1,48 millones de metros cúbicos al año.
El número de imbornales --las aberturas que sirven para drenar el agua, generalmente de lluvia o de escorrentía-- es de 72.000, mientras que son más de 65.000 los llamados pozos de registro. A través de estos últimos elementos se accede al alcantarillado para la inspección visual y la ejecución de tareas de mantenimiento preventivas y correctivas de la propia red.
El mapa del alcantarillado de la capital valenciana comprende "el término municipal de València y el ámbito concreto de todas las infraestructuras, cauces, instalaciones, edificios y recintos existentes, así como las conexiones con otros sistemas supramunicipales o de municipios limítrofes, como por ejemplo la acometida del bombeo de Massarrojos hasta el colector de Rocafort", según refleja el expediente instruido por el personal técnico del Servicio del Ciclo Integral del Agua.
Mantenimiento y limpieza
La empresa adjudicataria se hará cargo, en los próximos quince años, del mantenimiento y la limpieza de alcantarillas, colectores, imbornales, albañales, rejas de desbaste, fosas sépticas, pozos y estaciones depuradoras de aguas residuales municipales (EDAR).
Además, la UTE deberá gestionar los lodos y sólidos extraídos para su correcta eliminación directamente o mediante gestores autorizados, si fuera necesario.
Los pliegos técnicos del contrato contemplan la limpieza extraordinaria del alcantarillado ante avisos de malos olores, atascos, humedades, filtraciones y cualquier otro caso imprevisto que no pueda esperar a la limpieza ordinaria, ha precisado el edil portavoz.
La contrata se hará cargo también del cuidado, vigilancia y reposición de los elementos del sistema de alcantarillado, con especial atención a los de cubrición y cierre de la misma (tapas, rejas, sumideros, cerramientos, fachadas, cornisas, etc.) susceptibles de provocar accidentes a peatones y tráfico rodado. A tal fin, deberá reparar y reponer cuantos desperfectos y anomalías observe, ha apuntado el consistorio.
La empresa adjudicataria está obligada también al mantenimiento y actualización con datos de campo del sistema de Información de la Red de Alcantarillado (SIRA), cartografía del SMS y gestión de datos para planificación y cálculos.
Junto a los trabajos básicos de limpieza y mantenimiento, la UTE de Acciona Agua, Becsa y Cicloagua procederá a la renovación y adecuación del alcantarillado de determinados barrios de la ciudad y de tramos de colectores generales de singular importancia, para los que ya se encuentran redactados y aprobados los proyectos técnicos.
"No solo mantenemos, sino que invertimos, renovamos y mejoramos la red de alcantarillado de la ciudad. Además, también incluimos inversiones en vehículos nuevos, más eficientes y menos contaminantes, una sensorización de los equipos que permite anticiparse a los fallos y una renovación planificada de la red que da solución necesidades acumuladas de inversiones no ejecutadas en años anteriores", ha manifestado Juan Carlos Caballero.
El responsable municipal ha asegurado que "pueden estar tranquilos los vecinos de la ciudad de València porque este ayuntamiento, el gobierno de la alcaldesa María José Catalá, se preocupa también de estas cuestiones, de la renovación de un sistema de alcantarillado que es competencia municipal, que requiere de las inversiones, del cuidado necesario" y ante el que "no se va a esperar a que algo se rompa" para actuar".
Digitalización
Por otro lado, la Junta de Gobierno Local ha dado este viernes luz verde al proyecto de digitalización del sistema de abastecimiento de agua potable y de baja presión de la ciudad. En concreto, ha aprobado el proyecto 'Desarrollo de digitalización del Agua. Mejora en la operación y eficiencia energética de las estaciones de tratamiento de agua potable, ETAPS', que permitirá acceder a las ayudas que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE).
"El proyecto del Ayuntamiento consiste en la digitalización del sistema de abastecimiento de agua potable y de baja presión de la ciudad mediante el empleo de dispositivos de conexión de datos", ha precisado Juan Carlos Caballero.
El importe total asciende a 475.000 euros. La empresa mixta de gestión del agua, Emivasa, será la encargada de llevarlo a cabo. El consistorio aportará 227.000 euros, y el resto, 165.000 euros, serán asumidos por Emivasa, como beneficiara directa del PERTE que otorga el ministerio.